Uso responsable de la tecnología en la escuela

 Familias:

Compartimos la circular enviada por el Ministerio de Educación acerca de la regulacion del uso del celular.

   

El primer eje de nuestro Plan Estratégico Buenos Aires Aprende remite a los “Aprendizajes fundacionales”. Su principal objetivo es mejorar la calidad del aprendizaje de nuestros alumnos y alumnas. Para lograr esto, es esencial que el tiempo de clase sea de aprendizaje, y para ello, es fundamental asegurar la máxima atención y el bienestar de las y los estudiantes. En la Ciudad de Buenos Aires fuimos pioneros en la implementación de un Plan Integral de Alfabetización Digital con el Plan Sarmiento. Hoy nos toca asumir la responsabilidad de gestionar el uso de pantallas en las aulas.  Las computadoras, tablets y celulares pueden ser una herramienta cuando nutren el aprendizaje de niñas, niños y adolescentes y favorecen su desarrollo integral. Son una gran fuente de información y recursos educativos, y se adaptan a las necesidades de cada estudiante. Sin embargo, un uso excesivo de los dispositivos digitales, especialmente el celular en menores de edad, afecta negativamente a la salud mental, física y emocional: altera la conducta, afecta la atención y la sociabilización, y desde luego, el rendimiento académico. La atención de nuestros estudiantes se ve constantemente interrumpida por la exposición continua a las pantallas, les comparto algunos datos sobre el tema, que surgen de una encuesta que realizamos a familias y docentes. Con el objetivo de velar por el aprendizaje efectivo y saludable de las y los estudiantes, es fundamental que las y los adultos acompañemos el uso de la tecnología y fomentemos que sea seguro y responsable. De esta manera, se potencian los beneficios y se minimizan los riesgos. Por este motivo, a través de la Resolución N.° 2024-2075-GCABA-MEDGC y su anexo, decidimos regular el uso de celulares y dispositivos digitales en las aulas, y que los niños, niñas y adolescentes los utilicen solamente con fines educativos y bajo las condiciones establecidas por los equipos directivos y docentes.  Desde el Ministerio nos comprometemos a acompañarlos en las tareas que llevarán adelante cada uno desde su rol: las y los supervisores velar por el cumplimiento de esta norma; las y los directores elaborar en equipo el plan de acción adecuado al contexto y las necesidades de su comunidad educativa; y a las y los docentes en el desafío de implementarlo dentro del aula, como parte de la comunidad educativa. Contamos con su cooperación para que juntos podamos asegurar un entorno de aprendizaje que priorice el bienestar y el desarrollo integral de las y los estudiantes.  Desde ya muchas gracias por su colaboración y el trabajo diario que realizan.   Un saludo afectuoso.